El Valle Sagrado de los Incas es un valle en la sierra sur (Peru) que contiene muchas famosas ruinas Incas. Se le llama Valle Sagrado porque contiene las propiedades personales del Gran Inca.

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Duración: 4 días
Período: la mejor época del año para realizar este itinerario es desde mediados de abril hasta mediados de noviembre

El Valle Sagrado de los Incas está favorecido por un clima templado y una rica variedad de cultivos organizados en su mayor parte en andenes. Es en esta región donde se produce una de las mejores calidades de maíz del país que es exportado en el mundo. Rodeado de magníficos picos nevados, numerosas fuentes de aguas termales se encuentran a los largo del valle, siendo están alimentadas por la actividad volcánica. Acompañados de algunas ruinas, la ruta conduce al más celebre de los restos arqueológicos del Perú: Machu Pichu.

Día 1: Cuzco, baños termales de Lares, Huacahuasi

Temprano por la mañana, salida en vehículo de Cusco, la capital de los incas (3350 m). A lo largo del trayecto se pueden ver algunos restos arqueológicos, pueblos con típicos mercados artesanales así como numerosos cultivos siguiendo los meandros del río Urubamba. Llegará al pueblo de Calca (2940 m). Aquí dejará la pista principal para encaminarse hacia el paso de Huacahuasi (4400 m) y descender al valle de Lares. Rápidamente llegará a los baños termales de Lares (3200 m) y aprovechará de las piscinas con diversas temperaturas (entre 28 y 35 °C).

Luego del almuerzo, comenzará la caminata en dirección de Huacahuasi (3600 m), donde instalará el primer campamento para pasar la noche. (La temperatura desciende durante la noche).

Nota: 5 horas en vehículo + 3 horas de caminata.

Día 2: Huacahuasi, Abra de Epsay, Patacancha

Luego de un buen desayuno, empezará la caminata de unas 4 horas en dirección del abra de Epsay (4400 m). A lo largo del camino encontrará diversas comunidades locales que conservan tradiciones heredadas generación tras generación. Almuerzo al borde de la laguna de Ispaycocha con una vista al glaciar Verónica (5750 m). Paso del abra del Cóndor a 4100 m, desde donde podrá observar alpacas, llamas y vicuñas. Después, descenso hasta Patacancha (3800 m), lugar del campamento para pasar la noche.

Nota: 6 horas de caminata.

Nota: Desnivel de 3800 m, 4100 m, 3800 m. Son 7 horas de camino aproximadamente.

Día 3: Patacancha, Huilloq, Ollantaytambo, Aguas Calientes

Continuará el descenso tomando un camino inca que le llevará hasta las ruinas de Puma Marca. Pausa para almorzar en Willoq (3800 m). Pequeña visita de las ruinas de Puma Marca (3400 m), conocidas por sus muros incas en forma de zigzag como sistema de defensa. Esta estructura tenía la función de proteger a la ciudad de Ollantaytmabo.

El camino continúa junto al río Patacancha para llegar al pueblo inca de Ollantaytambo (2850 m). Visita de la ciudadela antes de tomar el tren de la tarde a Aguas Calientes. Noche en hotel.

Nota: Desnivel de 3600 m a 2050 m; unas 4 horas de camino.

Día 4: Aguas Calientes, Machu Pichu, Cuzco (en tren)

La existencia de Machu Pichu fue difundida por el historiador estadounidense Hiram Bingham en 1911. Los arqueólogos estiman que esta ciudadela fue construida a mediados del siglo XV. Hoy en día hay diversas hipótesis sobre el rol que tenía esta ciudadela inaccesible: ¿fue un puesto militar, una ciudad escondida para las vírgenes del Sol, un lugar de descanso? Todo queda en un enigma.

Salida temprano por la mañana, hacia las 6:30 en bus hasta la entrada la ciudadela de Machu Pikchu. Día consagrado a la visita del lugar. Regreso a Aguas Calientes en bus y conexión con el tren a Cusco.

Sugerencia: Es posible acceder al pico del Huayna Pikchu. La subida es bastante difícil. Es imprescindible tener buenos zapatos, no llevar carga y no sufrir de vértigo. Desde arriba se tiene una magnifica vista de Machu Pikchu. Contar 2 horas aproximadamente ida y vuelta o caminar hasta la Puerta del Sol, menos peligroso y con hermosas vistas del paisaje. Contar una hora y media, ida y vuelta.

Nota: Los horarios de tren son confirmados con la reserva y los campamentos pueden variar según el clima y el estado de salud de los clientes.