Orleans
Orleans (en francés Orléans) es una ciudad ubicada en el centro de Francia. Es la capital administrativa del departamento del Loiret y de la Región Centro, siendo una de las ciudades más relevantes de la zona tras París.
Ubicada en una posición estratégica junto al río Loira, Orleans es una ciudad cargada de historia. Sin dudas, la más relevante y más conocida es la de Juana de Arco, la heroína que desde esta ciudad lideró a las tropas francesas en la Guerra de los Cien Años. La historia de Juana de Arco se refleja en cada rincón de la ciudad, desde los vitrales de su imponente catedral y la réplica de su hogar hasta el nombre de las principales calles y plazas.
Aunque es una ciudad pequeña, sin grandes atractivos turísticos de fama internacional, es una bella y tranquila urbe, que refleja en gran medida la vida del francés promedio, alejado de las grandes metrópolis cosmopolitas como París o Lyon. Es posible recorrer en un sólo día sus principales hitos y disfrutar de caminar por sus calles, pero es posible que quiera extender su estadía y utilizar Orleans como su base para luego recorrer los diferentes castillos levantados en el valle del Loira (Chenonceau, Sully-sur-Loire, Blois, Chambord o Chinon).
Comprender
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Los orígenes de la ciudad se remontan a la época del pueblo galo, cuando en sus tierras existía la localidad conocida como Cenabum. En el año 52 a. d. C. fue conquistada por Julio César y en los años posteriores la ciudad fue reconstruida por el emperador Aureliano. Aureliana Civitas o Aurelianum, como se conoció a la nueva ciudad, dio origen a la actual Orleans. Al ser un punto estratégico sobre el río Loira, Orleans se convirtió en una de las ciudades francesas más relevantes de la Edad Media. Poseía uno de los pocos puentes de todo el río y, al ser el punto más al norte del río, era también el más cercano a París, convirtiéndose en clave para el comercio pero también para la defensa de la Francia medieval.
Los históricos conflictos entre Francia e Inglaterra derivaron en la Guerra de los Cien Años, una sucesión de conflictos dinásticos que enfrentaron bélicamente a ambas naciones. A comienzos del siglo XV, Inglaterra dominaba gran parte del territorio francés y asedió Orleans desde 1428. En enero de 1429, una muchacha de 17 años proveniente de la Lorena, llegó a la ciudad afirmando recibir el mensaje de Dios para liderar las tropas francesas. Pese a la reticencia inicial, Juana de Arco demostró ser una virtuosa líder militar, rompiendo el asedio inglés y logrando una serie de victorias que culminaron con la coronación de Carlos VII como rey de Francia en Ruan. Tras ello, la llamada Doncella de Orleans, fue derrotada y posteriormente ejecutada en 1431. Pese a que su esfuerzo no logró la victoria definitiva de Francia en la guerra (recién lo lograría en 1453), Juana de Arco se convirtió en una figura icónica en la creación de la identidad nacional francesa. En la actualidad, gran parte de la ciudad de Orleans rinde tributo a uno de sus principales referentes.
Una vez acabada la cruenta guerra, Orleans volvió a resurgir como nudo comercial. Los impuestos por cruzar el puente sobre el Loira permitieron que la ciudad se convirtiera en una de las más ricas del país. El título de duque de Orleans fue asumido por miembros de la mismísima familia real y muchos de sus titulares posteriormente asumieron como reyes del país. La ciudad se convirtió en un importante refugio en Francia para importantes figuras protestantes, quienes a su vez permitieron desarrollar la cultura y la intelectualidad en la Universidad de Orleans. Orleans fue uno de los primeros lugares en que se levantaron los protestantes durante las llamadas «guerras de religión», siendo cercada la ciudad durante gran parte de 1563. La victoria católica en la guerra y la imposición del catolicismo como religión estatal en 1685 acabó con la participación pública de los protestantes hugonotes.
Como posición estratégica, Orleans fue ocupada por las tropas extranjeras, tanto en la Guerra franco-prusiana de 1870 como en la Segunda Guerra Mundial. Los bombardeos en este último conflicto destruyeron gran parte de los edificios históricos. Por su significación histórica, Orleans fue una de las primeras en ser reconstruidas, comenzando los trabajos en 1945, lo que permitió recuperar edificios severamente dañados como la Catedral.
Llegar
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La principal forma de llegar a Orleans es utilizando el servicio ferroviario que conecta a la ciudad con el resto de Francia, y en particular con París, donde se encuentran los aeropuertos internacionales más cercanos a Orleans: Charles de Gaulle y Orly. Los trenes desde París parten en la Gare d'Austerlitz y toman una hora aproximadamente. Suelen tener una alta frecuencia, pasando de 20 minutos entre tren y tren en horario punta a unas 2 horas de espera durante los fines de semanas. El pasaje desde París suele costar entre € 15 y € 20, dependiendo de la anticipación al comprar el pasaje ante la SNCF (es posible comprar en línea).
Existen dos estaciones de trenes en la ciudad:
- Gare d'Orleans, ubicada justo en el centro de la ciudad. Frecuentes servicios regionales a la estación de París-Austerlitz y a Blois, y algunos servicios de larga distancia a Nantes y Tours.
- Gare des Aubrais-Orléans, en los suburbios, posee una mayor variedad de servicios al estar ubicada sobre la línea principal de trenes franceses. Incluye servicios regionales a París-Austerlitz y Tours, servicios de larga distancia a ciudades como Burdeos, Toulouse y Lille (TGV), e incluso algunos trenes internacionales en dirección a España.
Para llegar en auto desde París, es posible tomar la autopista A10 desde el sudoeste de París y llegar en menos de una hora y media de viaje. Otra alternativa es tomar la carretera N20, que no tiene peajes pero demora algo más al pasar por varias localidades intermedias.
Desplazarse
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Orleans es una ciudad pequeña y muy amable con el peatón, por lo que caminar es la opción preferible para moverse en la ciudad. Los principales hitos turísticos están a pocos metros de distancia, por lo que sólo debiese preocuparse de utilizar transporte público si va a la relativamente alejada estación de Les Aubrais-Orleans.
El transporte público está administrado por TAO (Transports de l'agglomération orléanaise) y coordina diversos medios como tranvías, buses y bicicletas de préstamo. El tranvía está articulado a lo largo de dos líneas perpendiculares entre si: la línea 1 va en línea norte-sur conectando las dos estaciones de trenes, el centro histórico y la Universidad de Orleans, mientras la línea 2 va en sentido este-oeste, combinando ambas en la Place De Gaulle. En tanto, los servicios de buses recorren la ciudad fuera del perímetro histórico.
Los pasajes se pueden comprar en las estaciones de tranvías y buses. El billete sencillo, que permite combinaciones gratis dentro de una hora, cuesta € 1,50. También es posible utilizar la tarjeta Moda Pass' que permite realizar recargas, con un costo de € 3 por unidad.
Ver
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Partiendo desde la estación central de Orleans (Gare d'Orleans) puede ir hacia el sur por la Rue de la République, una hermosa avenida por la que avanza el tranvía y que cuenta con varios locales comerciales. Caminando no más de 400 m, uno llega a la Place du Martroi, que es probablemente uno de los puntos de referencia más importantes de la ciudad y que en antaño fue el lugar de ejecución de los criminales orleaneses. En su centro se encuentra la imponente estatua en homenaje a Juana de Arco, construida por Denis Foyatier en 1855 y en que aparece la Doncella dando gracias a Dios por sus victorias. A su alrededor encontrará diversos edificios, muchos de los cuales fueron totalmente reconstruidos tras la destrucción que dejó la Segunda Guerra Mundial.
Desde la Place de Matroi, puede seguir el camino del tranvía para llegar a la Place De Gaulle, donde destaca un museo en la que fue la Casa de Juana de Arco (entrada: € 3). Junto a la casa se encuentra un pequeño pasaje al jardín de Jacques Boucher, en el cual quedan algunos elementos de su antigua casa de estilo renacentista. Más allá están los restos del campanario de la iglesia de Saint-Paul, construida a principios del siglo XVII.
Volviendo por la Place De Gaulle, se puede caminar al oriente hasta la Catedral de la Santa Cruz, el principal edificio de la ciudad. Durante la época romana, se construyó una pequeña iglesia en el lugar, que contenía una supuesta reliquia de la vera cruz. La sede del obispo de Orleans fue construida entre 1278 y 1329, con un imponente estilo arquitectónico gótico que semejara la época de riqueza que vivía la ciudad. Juana de Arco, cuya historia aparece reflejada en los vitrales de la iglesia, participó en la misa realizada en ella tras el fin del sitio, el 2 de mayo de 1429. La iglesia fue atacada por hugonotes en 1568, destruyendo algunos pilares de la iglesia que provocaron el colapso de la nave principal. En 1601 se inició la reconstrucción de la iglesia, pero diversos eventos (incluyendo la Revolución) retrasaron los trabajos y recién fue inaugurada en 1829. Tras la Segunda Guerra, una nueva operación permitió reconstruir la dañada estructura. La catedral tiene un largo de 140 m y un ancho exterior de 65 m; sus dos torres se elevan hasta los 88 metros, mientras la aguja central alcanza los 114 m.
Detrás de la iglesia se encuentra el hermoso edificio del Obispado y el tranquilo Jardín del Obispo (Jardin de l'Evéché). Al norte, justo frente a una de las fachadas restauradas recientemente de la Catedral, se encuentran restos del muro que existía en la ciudad durante la época galo-romana. Siguiendo la ruta del tranvía están el Hotel de Ville (Ayuntamiento) y el Hotel Groissot. Este último edificio, de bellísimo estilo gótico trovador y que es conocido por ser sede de los matrimonios civiles de la ciudad. Un poco más allá se encuentra el Campo Santo, que en el pasado fue el principal cementerio de la ciudad pero que, tras ser saqueado en las guerras de religión, fue convertido en un mercado para dar paso en la actualidad a una sede de eventos culturales. El lugar destaca por su verde césped rodeado por bellas arcadas y la vista omnipresente de la catedral. Entre el Campo Santo y la Catedral está el Museo de Bellas Artes, con obras variadas de artistas como Rodin, Gaugin o Picasso.
Regresando a la Place du Martroi, es posible seguir la Rue Royale, la que en la antigüedad fue la vía principal del comercio de la ciudad. A lo largo de esta calle y las cercanas, es posible observar varias casas y edificios clásicos de Orleans. Entre la Rue Royale y la Rue Jeanne d'Arc (que une la Catedral y la Place De Gaulle) se encuentra el Museo Arquitectónico e Histórico de la ciudad. Avanzando al sur se encuentra el Puente Georges V, principal punto para cruzar el río Loira desde el siglo XVIII. A lo largo de la ribera del Loiret, hay varios puntos para disfrutar de un día soleado, haciendo picnic, caminando o practicando deportes. Otros tres puentes cruzan el río, siendo el más destacado el Puente de Europa, diseñado por el español Santiago Calatrava.
Hacia el sur de la ciudad se encuentra el campus principal de la Universidad de Orleans. En sus alrededores se encuentra el Parc Floral de la Source (entrada: € 6), un enorme jardín botánico que es el punto turístico con más visitantes de todo el departamento del Loiret.
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Comprar
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Los principales lugares para el comercio en la ciudad se ubican a lo largo del eje formado por la Rue de la République, partiendo por la estación de trenes. Junto al recinto ferroviario se encuentra el Centro Comercial Place d'Arc, que cuenta con varios locales y un supermercado Carrefour. Caminando hacia el sur por la Rue de la République, podrá encontrar locales de ropa, chocolaterías como el Atélier du Chocolat o una sucursal de FNAC para tecnología, música o libros. Junto a la Place du Martroi, la Place De Gaulle y la Rue Jeanne d'Arc verá otros locales de interés. Continuando hacia el sur, antes de llegar a la ribera, encontrará un gran edificio que corresponde a Les Halles, otro importante centro comercial.
Al igual que en el resto de Francia, el uso de la tarjeta de crédito es bastante común. Se recomienda contar con una que tenga habilitado el sistema de chip, que es el más utilizado en la actualidad en Francia.
Comer y beber
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Aunque hay varios lugares para comer en la ciudad, la mayoría se concentra a lo largo de la Rue de Bourgogne, en el centro histórico a pocas cuadras de la ribera del Loira. Allí puede encontrar una variedad de restoranes de comida francesa, aunque también destacan unos locales de comida internacional, desde italiana a japonesa y vietnamita. Si es que no busca algo tan sofisticado, puede seguir al oriente por la Place De Gaulle al área de la Madeleine podrá encontrar varios locales instalados por inmigrantes (principalmente, magrebíes) que ofrecen döner kebabs y otras comidas al paso.
- Eugène, 24 rue Sainte-Anne. Elegante restorán, que destaca por sus platos tradicionales del sur de Francia. Precio: Menú: € 25-€ 51.
- La Dariole, 25 rue Étienne-Dolet. Cercano a la catedral, es un fino restorán francés con un toque de originalidad. Precio: Menú: € 26-€ 38.
- La Parenthèse, 26 Place du Châtelet. Ubicado en un edificio de 1597, es famoso por su acercamiento a modernizar la comida francesa. Precio: Menú: € 35.
- La Tavola, Les Halles. Restorán italiano clásico, dedicado principalmente a las pizzas y pastas.
- Mac Kebab, 16 Rue du Jeanne d'Arc. Sencillo local de comida rápida, destacando diferentes versiones de kebabs. Precio: € 5 por persona.
- Pizzeria Capri, 103 bis Rue du Faubourg-Madeleine. Buenas pizzas y pastas.
- Tokyo, 14 Place du Châtelet. Dedicado a la preparación de sushi y comida japonesa. Precio: Menú: € 15-€ 30.
Para beber, también la zona entorno a la Rue de Bourgogne y la Place du Châtelet es recomendada.
- Havana Café, 28, Place du Châtelet. Cuenta con mesas tanto en interior como en exterior.
- L'Amazone, 105, Rue de Faubourg Madeleine. Club nocturno, especializado en música de estilo africano, zouk, reggae y hip hop.
- Le Paxton's Head, 264, Rue de Bourgogne. Pub de estilo inglés, algunas noches cuenta con karaoke.
- Le Petit Barcelona, 218, Rue de Bourgogne. Atmósfera tranquila, con varias mesas para compartir con amigos.
Dormir
[editar]Orleans no se caracteriza por ser una ciudad dedicada al turismo, pero tiene una respetable variedad de hoteles para aquellos que necesiten pasar una noche en el lugar.
- Hotel de l'Abeille, 64, Rue d'Alsace Lorraine. ☎ +33 2 38 53 54 87, ✉: contact@hoteldelabeille.com. Hotel sencillo con una arquitectura retro, pero con todas las comodidades actuales. Característica: ★★★.
- Mercure Orléans Centre, 44 quai Barentin. ☎ +33 2 38 62 17 39. Junto a la ribera del río, un hotel moderno, especial para encuentros de negocios. Característica: ★★★★.
- Quality Hotel Orléans Centre, 40, Rue de la République. ☎ +33 2 38 53 24 64, ✉: hotel@quality-orleans.com. Hotel tres estrellas, ubicado en la zona peatonal de Orleans, junto a la estación de trenes. Característica: ★★★.
Aprender
[editar]La Universidad de Orleans es una excelente alternativa para aquellos que desean aprender francés o de Francia. El Institut de Français ofrece diferentes tipos de cursos dependiendo del nivel y la intensidad de las clases. Las clases desarrollan las competencias de comprensión y expresión escrita y oral, a través del estudio la lengua, de la cultura y de la civilización de Francia. Existen cursos anuales y semestrales (septiembre-diciembre y enero-mayo), además de algunos cursos intensivos y de verano.
Al ser una ciudad pequeña, vivir en Orleans es muchísimo más barato que en las grandes urbes como París o Lyon. La universidad está a corta distancia de gran parte de Orleans, por lo que es una buena opción para aquellos que desean estudiar y conocer algo más del país.