Taranto (Tarantino: Tarde) es una ciudad de la costa jónica de Apulia, en el sureste de Italia. Con 200 000 habitantes, es la tercera ciudad del sur de Italia y la segunda de la región, después de la capital, Bari. Taranto alberga una de las bases navales más importantes de Italia y cuenta con una historia milenaria, ya que fue una de las ciudades más poderosas del Mediterráneo durante la época griega

Comprender

Tarento fue fundada en el año 706 a.C. por colonos griegos dorios, como única colonia espartana fuera de Grecia (la ciudad sigue llamándose "la ciudad espartana"). Una leyenda atribuye el mérito de la fundación de la ciudad a Taras (Τάρας) que, según la mitología griega, era hijo de Poseidón y de la ninfa Satyrion; tras salvarse de un naufragio montando un delfín, que le envió su padre, imagen visible en muchas monedas antiguas.

La ciudad, llamada efectivamente Taras, se convirtió pronto en una potencia comercial y militar del mundo de la Antigua Grecia, así como en el centro más importante y habitado de la Magna Grecia. Su época dorada terminó en el 272 a.C., con la conquista por parte de los romanos, que optaron por favorecer a Brindisi como puerto principal del Imperio Romano.

La ciudad, ahora llamada Tarento, entró en un periodo de decadencia y posteriormente fue disputada entre los lombardos, los bizantinos y los árabes, siendo atacada y saqueada en varias ocasiones. Luego fue conquistada por los normandos, que la convirtieron en la capital del Principado de Tarento, un feudo casi independiente del Reino de Sicilia (y posteriormente de Nápoles), desde 1088 hasta 1465.

La ciudad fue gobernada posteriormente por la Monarquía de España (durante dos siglos) y por los Borbones, que crearon el Reino de las Dos Sicilias en 1815. Taranto tenía una población de unos 18 000 habitantes, todos ellos viviendo en la pequeña isla del casco antiguo.

Tras la unificación italiana, la ciudad se convirtió en 1866 en la base principal de la recién creada Armada italiana, y lugar de importantes acontecimientos como la "Batalla de Taranto" en 1940, con la victoria de las fuerzas navales británicas frente a las italianas. No muy lejos del centro de la ciudad se construyó una enorme acería, lo que provocó una polémica que aún hoy perdura, haciendo que la ciudad sea famosa sólo por su industria.

A pesar de ello, Taranto no es sólo una acería, sino un lugar que merece la pena visitar con una gran cantidad de tesoros artísticos e históricos.

Desplazarse

AMAT es la empresa que gestiona el sistema de transporte local en autobús. El billete sencillo (biglietto ordinario) puede adquirirse en cualquier estanco o vendedor de periódicos por 1 euro, o bien puede comprarse a bordo por 1,50 euros y es válido para un solo viaje. También puede elegir un billete válido para 90 minutos (1,30 euros), un billete de solución para un día (2,60 euros), un billete para 3 días (6,50 euros) o un billete para 7 días (15,50 euros).

Hacer

La empresa AMAT también ofrece el servicio de "idrovie" (vías navegables), que consiste en un recorrido de 1½ horas navegando por el Mar Grande y el Mar Pequeño con la presencia de un guía que le explicará la historia de Taranto y le contará diversas curiosidades y anécdotas. Pasará por la isla de la ciudad vieja, la costa de la ciudad moderna y la isla de San Pietro, navegando por el canal navegable de ida y vuelta.

Los barcos salen del muelle de tierra firme en Piazzale Democrate, cerca del puente de piedra de Porta Napoli. El coste es de 8 euros para un billete ordinario, 6 euros si se forma parte de un grupo de más de 20 personas. Las visitas comienzan a las 10:30, 11:00 o 16:30, según el día y el mes. Consulte la página web de AMAT para obtener información detallada.

Beber y salir

Una de las bebidas más populares es sin duda la "Birra Raffo", la cerveza de Taranto por excelencia. Muy arraigada en la historia reciente y en la sociedad de la ciudad, representa una especie de institución local que puede disfrutarse prácticamente en cualquier bar o restaurante.